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martes, 24 de septiembre de 2013

Torre / Únicos

- Hola. ¿Tengo tiempo para uno o para dos? Son cortos. El primero que voy a leer lo dedico a Álvaro Mutis, que nos ha dejado hace dos días. Trata del declive físico de una persona que sin embargo mantiene intactas sus facultades intelectuales.

- ¡Al decir eso no me mires a mí! - pide Carlos Salem.

- ¡Que no! Ya he dicho que va por Álvaro Mutis.

TORRE

Has empezado a subir sin darte cuenta,
ganando experiencia peldaño a peldaño,
viendo paisajes maravillosos por cada aspillera.

A medida que asciendes,
el esfuerzo es mayor:
jadeas y sudas,
pero el cuerpo todavía responde.

Cuando llegas arriba,
el panorama te corta la respiración:
contemplas tus amores apasionados,
tus amistades fieles,
tus hijos felices
o tus éxitos académicos y laborales.

Parado en la cima de la torre
notas que algo va mal:
la argamasa comienza a desprenderse.
Cae al vacío una piedra pequeña.
Después, otra más grande.
No es un terremoto:
ningún árbol de los que ves se mueve,
ni tiemblan otras torres de tu entorno.
No, algo le pasa solo a la tuya:
uno a uno se hunden los escalones;
ya no puedes bajar.
Grietas implacables se abren en las paredes.
Secciones enteras del muro se desgajan,
y sin embargo, la plataforma donde asientas tus pies
no se altera.

Al final quedas flotando en el aire,
frágil llama,
esperando el golpe de viento
que te extinga definitivamente.

   14 de septiembre de 2013


El segundo lo dedico a todos los que estamos aquí.

ÚNICOS

Todos somos únicos.
Traza simplemente un círculo con tu mano.
Nadie hará el mismo círculo, en el mismo espacio.
Nadie desplazará las mismas moléculas de aire, 
ni de la misma manera.
Nadie pensará lo mismo mientras lo traza.
Nadie, una vez trazado,
cuando se levante
y dirija sus pasos hacia la salida,
pisará exactamente los mismos centímetros cuadrados de suelo
ni tomará, ya en la calle,
el mismo rumbo.

   14 de septiembre de 2013 




martes, 17 de septiembre de 2013

Vuelta / Way / Paisaje

- Buenas noches y muchas gracias por venir. ¿Qué tal las vacaciones?
- Mejor no preguntes - dice Carlos.
- El primero que voy a leer es un poema de regreso de vacaciones. El primer verso lo pronunció mi compañero de viaje, José, al aterrizar en Barajas.

VUELTA

Volvemos a la tierra de los ojos marrones
tras haber cosechado colores de miradas
azules, verdes, grises, violetas y turquesas,
a veces adornadas con sinceras sonrisas.

Volvemos a la patria de los ojos huidizos,
los gestos desabridos, airados a menudo,
la posibilidad que es de raíz negada,
sin siquiera haber permitido que brote.

¿Cómo pueden dos mentes que hablando no se entienden
conectar en un soplo de aire de pestañas,
y otras dos que trabajan con las mismas palabras
rechazarse de plano en un duro chispazo?

   14 de septiembre de 2013


Decidí hace cuatro días que hoy leería el segundo y los acontecimientos lo han hecho completamente procedente. Es en inglés y está dirigido a la sociedad norteamericana y dedicado a Obama (buena le ha caído al pobre).

             WAY

From what you are to what you desire
There is a long, long way.
The first step is assessing
What  you really are.
This may take many months.

The second one is understanding why.
This may take years.

The third step is deciding what you want to be.

The last one is agreeing on which measures
would take you from step one to step three
And putting them into practice.

This may take decades
Or never be done.

But remember:
The longest journey
begins with the smallest step.

  July, 28th 2013



Y el tercero es, por ahora, el único de mis poemas que me ha hecho llorar mientras lo escribía.

PAISAJE

Nuestra memoria es un paisaje desolado
donde vagan cadáveres sin enterrar,
salpicado de regiones inexploradas,
con grave peligro para quien ose acercarse.

Plagado de recuerdos sucios, mezquinos,
estériles como los guijarros de un despeñadero,
cortantes y afilados.

Recuerdos con una increíble capacidad de dañar,
no solo a quienes realmente los vivieron,
sino también a sus hijos, a sus nietos,
y así hasta quién sabe cuántas generaciones.

Mientras siga radiactivo este cementerio nuclear,
cualquier semilla que plantemos
crecerá endeble y deformada por las mutaciones.

¡Ya basta de echar tierra!
¡Lo que hay que echarle es valor!

    7 de septiembre de 2013

El poema que más me ha gustado de esta velada ha sido Cambalache XXI, de Carlos Salem.




martes, 10 de septiembre de 2013

Combate / La mujer del árbol / Unidades

Buenas noches y muchas gracias por estar aquí. La semana pasada salimos en la tele. El jueves o así. ¿Alguien lo vio?

Quería empezar recomendándoos un poeta que descubrí anteayer. El sábado y el domingo se celebró Toledo para poetas. Estuve repasando poemas de los participantes y uno de ellos me pareció sumamente original y divertido: Daniel Orviz. ¿Lo conocéis?

- Se crió a mis pechos - dice Carlos Salem.
- Pues muy bien criado. Sin más, empiezo con un poema que, aunque parezca hoy pintiparado, escribí hace tres semanas y decidí hace cuatro días que iba a leer en esta sesión. Casi parece una continuación del de Margaret, que me ha gustado mucho.

COMBATE

Los paladines intercambian mandobles.
La multitud se agita enloquecida.
Baña el sudor sus frentes enfrentadas
y resuenan los golpes como truenos.
Sus cuerpos son flexibles como juncos,
ágiles cual gacelas asustadas,
fuertes como toros enfurecidos,
y su astucia avergonzaría al zorro.

Una nube de polvo los envuelve,
levantada por sus propias pisadas,
y un sol de plomo los abrasa sin tregua
hasta que uno alcanza la victoria.

Se llaman Nadal y Djokovic.

   24 de agosto de 2013

- ¡Qué partidazo! - dice entre risas alguien del público.


El segundo es una historia real que sucedió hace años en mi barrio y de la que fui testigo directo.

LA MUJER DEL ÁRBOL

Hace años, bajo este ciruelo rojo,
vivió durante meses una mujer
joven, negra, pobre e inmigrante.

Cubrió de cartones el murete
que rodea el tronco
y así se construyó un habitáculo,
como una larva de mariposa.

Pasó en él un invierno.
A la primavera siguiente
la desalojaron:
un día el árbol apareció con sus hojas rojas,
pero desnudo,
despojado de su insólito habitante,
sin la presencia que abrigaba sus raíces.

No sé qué fue de ella,
si encontró trabajo
y pudo empezar a vivir
en una casa normal,
extrañando sin duda la vegetal,
o si tuvo que volver a su país.
Pero cada vez que paso por allí
me acuerdo de ella
y me pregunto en cuántas mentes habrá quedado su recuerdo
y cuándo se desvanecerá de todas.

  14 de agosto de 2013


Y el último es una historia que no ha sucedido nunca, ni sucederá, y precisamente por esa poderosa razón, hay que inventarla.

        UNIDADES

Una tarde se cayó el sistema informático
del congreso de metrología.
Los asistentes se refugiaron en el bar.
Allí, entre muchas cervezas
y algún que otro whisky,
decidieron que no bastaba con el metro
para evaluar distancias,
con el segundo
para medir el tiempo,
ni con la candela
para calibrar la intensidad luminosa.

Y acordaron crear la gioconda,
para medir la belleza,
de un rostro, un paisaje o una sinfonía;
la hidra,
para evaluar la indignación de una multitud.

Quisieron crear una unidad
para medir el placer,
pero no se pusieron de acuerdo en el nombre.

Finalmente,
por aplastante unanimidad,
establecieron el jehová
para expresar cuán inefable es una sensación,
cuán inexpresable es un concepto,
cuán inconmensurable es aquello
que no solo no puede ser medido,
sino ni siquiera aprehendido 
por la humana inteligencia.

  5 de agosto de 2013


martes, 3 de septiembre de 2013

Budapest / Ángel / Dicha

Hola. Bienvenidos a una nueva temporada de sesiones de poesía. Quería contar que un programa de Radio Valentia, El rincón de las letras, está interesado en entrevistar a los poetas que leemos en estas sesiones. Así que ya sabéis, si os apetece, escribid un correo a Miriam. Si queréis ver el tipo de preguntas que hace, podéis leer en mi blog, Discursos a los diablos, la entrevista que me hizo el 21 de agosto.

El primer poema que voy a leer me vino al terminar un viaje (por supuesto, en varias etapas) de cuatrocientos quince kilómetros en bicicleta. Lleva el nombre de la ciudad de destino:

         BUDAPEST

Vuelo sobre el puente amarillo,
sobre la áurea luz del atardecer,
que como ninguna otra hace destacar todo.

Sobre los ruidosos tranvías,
sobre los distraídos viandantes,
sobre las sonrisas de las ninfas húngaras,
enmarcadas por sus dorados cabellos.

En un círculo de kilómetros de ancho
todo confluye en mí,
todo pivota en la palma de mi mano.

He llegado.

  Budapest, 30 de agosto de 2013

Budapest, Puente de Margarita

El segundo se me ocurrió a raíz de que una persona que había estado a un clic de comprar un billete para el vuelo Madrid-Canarias aquel fatídico agosto coincidiera en la misma mesa con otra cuya hija había tenido la suerte de que su novio fue de los únicos catorce pasajeros que no resultaron heridos en el accidente del Alvia. Se titula...

         ÁNGEL

Algunas veces el ángel de la muerte
te roza con sus alas.
Ha examinado tu vida toda entera
y optado por dejarla.
Su aliento ha congelado tu epidermis
de lo cerca que pasa,
y tu respiración se ha detenido
hasta volver la calma.
Se disipa el peligro mientras laten
tus venas desbocadas,
y percibes cuán frágil es tu vida,
cuán leve y delicada.
La valoras muchísimo más que antes,
con tu nueva balanza,
y notas que es lo único que tienes,
es decir, casi nada.

  Budapest, 1 de septiembre de 2013



Y para compensar, el último trata de algo que está muy de moda, pero que nadie concreta en qué consiste. Aquí tenéis una descripción detallada por un testigo de primera mano:

               DICHA

La felicidad es como una victoria interminable.
Un llano que nunca te cansas de recorrer.

Una luz que te ilumina permanentemente
sin proyectar sombra.

Aire fresco entrando y saliendo de tus pulmones
sin que ninguna angustia los oprima.

La ausencia de dolor, de preocupaciones,
de frustraciones, remordimientos, miedos
y el solo deseo de seguir disfrutándola.

Persíguela y huirá de ti.
Intenta encerrarla en un recipiente
herméticamente blindado
y lo descubrirás vacío. 
Pero si un día te das cuenta
de que se ha posado en tu corazón,
cual pétalo traído al azar por el viento,
deja que lo irrigue hasta sus raíces,
deja que lo fortalezca y la abrace
y prepárate para volar
hacia horizontes ilimitados.

  17 de agosto de 2013

De los poemas leídos esta sesión me gustó mucho Ansias, de Álvaro Deudero. Para no variar, no lo he encontrado en Internet.